La española Sandra Gómez se proclamó campeona del mundo en marzo de SuperEnduro, pero no supo que no recibiría los 600 euros de premio en metálico hasta después
La Federación Internacional de Motociclismo asegura que la decisión responde a una necesidad de reducir costes para mantener el campeonato ante el bajo número de competidoras
"Con los premios que yo tengo, un hombre tendría otras condiciones, otra repercusión, otro sueldo, otra moto", sostiene esta joven de 23 años
No hay comentarios:
Publicar un comentario